No digas más nada.
No pronuncies ni una sola palabra.
No lo hagas.
No me pidas que te suelte.
Ni que te olvide.
Ni que te deje,
o que no te bese.
No alteres este libre albedrio,
de cuando tus sentidos
interactúan con los míos.
No te quedes sin mí,
que no se contar estrellas,
si no estás conmigo.
El Guardián.
que bonito. te voy a copiar la frase final. jaja
ResponderEliminares broma, me ha encantado
guauh...me has dejado sin palabras, tan sencillo como hermoso!!
ResponderEliminarBiquiños Guardián!